Cómo instalar una persiana alicantina
Una persiana alicantina se caracteriza porque su funcionamiento es muy sencillo y porque ayuda a proteger del sol y evita la introducción de agentes externos perjudiciales, como los insectos o el polen; además, dispone de distintos modelos y es ideal para adaptarse a todo tipo de viviendas. Por eso, en el siguiente post te vamos a enseñar cómo instalar una persiana alicantina en tu casa.
Cómo medir e instalar una persiana alicantina
Una de las ventajas de apostar por una persiana alicantina es que no es necesario tener muchos conocimientos para medirla e instalarla. Es importante que, en cualquier caso, dejes un margen de 15 o 20 centímetros desde el hueco superior hacia arriba, para que tu persiana pueda descansar ahí cuando está enrollada.
Por el contrario, si llega hasta el suelo tienes que dejar 1 o 2 cm de distancia; en el caso de las ventanas normales, tienes que añadir 10 o 15 cm desde la parte inferior hacia abajo. Por su parte, en el caso de las laterales tienes que dejar entre 10 o 12 cm a cada uno de sus lados. Por otro lado, la instalación es muy sencilla y, para llevarla a cabo, debes realizar los siguientes pasos:
- Introduce dos cáncamos abiertos: deben estar centrados a unos 5 cm de cada borde.
- Marca los puntos de los enganches: tienes que hacerlo sujetando bien la persiana en la parte superior del hueco.
- Coloca un taco en cada punto: haz un taladro y mete un taco y los cáncamos cerrados.
- Cuelga la persiana.
Tipos de instalación de persianas alicantinas
La instalación de tu persiana alicantina varía en función del tipo de ventana que tengas; a continuación te mostramos los distintos tipos de instalación que puedes realizar.
Empotrada en el hueco de una ventana
Esta opción suele ser la más habitual, tanto para puertas como para ventanas. Lo primero que tienes que hacer es medir el ancho por tres partes diferentes; de esta forma, te aseguras que la pared no tenga ningún desnivel.
En cualquier caso, debes elegir la medida más estrecha y sumarle 2 centímetros, para que sobre 1 centímetro por cada lado. Por su parte, tienes que medir la altura de tu ventana o puerta y restarle 2 centímetros, para que respiren los puntos de colgadura y no roce la persiana en la parte inferior. En este caso, los cáncamos también tienen que ir instalados entre 7 y 10 centímetros en la parte superior de la ventana.
Para cubrir un paso sin puerta o ventana
Si vas a cubrir el espacio destinado a una puerta o una ventana, pero no cuentas con estos elementos, las medidas de tu persiana alicantina son distintas. Lo primero que tienes que hacer es medir el ancho del hueco; lo más recomendable es que lo hagas con un metro metálico, pues los de tela o plástico son más inexactos.
A la medida del hueco habrá que sumarle 10 centímetros, de forma que la persiana sobresaldrá 5 cm por cada lado. Después tienes que medir la altura y sumarle 25 cm; de esta forma, cuando la subas completamente se ajustará perfectamente.
También es importante que dejes entre 1,5 y 2 cm en la parte inferior, para evitar que la persiana roce el suelo y pueda estropearse con mayor facilidad. Por su parte, los cáncamos deben colocarse a una distancia entre 7 y 10 centímetros; de esta forma, compensas el peso de la persiana y haces que sea más fácil su funcionamiento.
Cubrir completamente una ventana convencional
Este proceso es exactamente igual que en el caso anterior; debes medir el alto y el ancho y sumar 25 centímetros y 10 respectivamente; además, también tienes que dejar entre 1,5 y 2 centímetros en la parte inferior y los cáncamos deben colocarse entre 7 y 10 centímetros.
Cómo has podido comprobar, instalar una persiana alicantina es muy sencillo y no te llevará mucho tiempo; por eso, no esperes más y hazte ya con el modelo ideal para tu vivienda. Evita la entrada del sol más moleste y previene la entrada de mosquitos en tu casa gracias a estos productos elegantes, prácticos y fáciles de usar. ¿A qué esperas para hacerte con la tuya?